Digamos.

Empezar demasiado rápido con te quieros que no se sienten y seguir con palabras que no son creíbles. Dicen que mas vale tarde que nunca así que quizá no corramos, tengamos precaución en decir ciertas palabras que son irreales, que no sentimos, que ni nosotros mismos nos creemos. Esperemos el tiempo que sea necesario, sin pasarnos, pero tampoco nos adelantarnos, y digamos cada minucia de todo lo que tenemos dentro en el momento mas adecuado.

Olvidemos.

Olvida lo que vivimos. Olvida cualquier recuerdo. Olvida que sucedió todo aquello. Olvida que me conociste. Hay momentos en los que quizá lo mejor hubiera sido no habernos cruzado jamás, nos hubiéramos quitado de encima muchas complicaciones. Fue bonito mientras duró, pero fue, porque ni es ni será nunca mas. Hagamos borrón y cuenta nueva, pero sin empezar de cero, comencemos el camino por donde se quedó, cada uno por su lado, sin mirar atrás.